Aquí está mi humilde homenaje a mis amigos del MESON DE COLUNGO, unas patatas con sepia que ellos bordan. Si tenéis ocasión os dáis una vuelta por Colungo (Huesca) os acercáis hasta el Mesón de Colungo, preguntáis por Pedro y dejáis que os den de comer y beber. Una pasada!
Bueno, pues aprovechamos estos últimos días de relativo fresquito, antes de que entre del todo la primavera, para hacer algún plato de los que yo llamo "de cuchara" y que mejor que un buén estofado de patata, acompañado en esta ocasión de sepia. Ya hemos cocinado algún otro estofado (como el marmitako o la porrusalda) y algún otro que subiré en otra ocasión, y, siempre, siempre, dan buen resultado, son fáciles de hacer y resultan económicos.
Bueno, pues aprovechamos estos últimos días de relativo fresquito, antes de que entre del todo la primavera, para hacer algún plato de los que yo llamo "de cuchara" y que mejor que un buén estofado de patata, acompañado en esta ocasión de sepia. Ya hemos cocinado algún otro estofado (como el marmitako o la porrusalda) y algún otro que subiré en otra ocasión, y, siempre, siempre, dan buen resultado, son fáciles de hacer y resultan económicos.
Vamos con la receta.
INGREDIENTES
·
1 Kg. de patatas
·
1 sepia de unos 400 gramos
·
½ cebolla
·
1 diente de ajo
·
½ vasito de vino blanco
·
½ vasito de salsa de tomate casera
·
2 cucharaditas de salsa de ñora
·
Perejil picado
ELABORACION
Para
empezar, cortaremos la sepia en trozos pequeños (a mí me gustan trozos de 1X1
cm. pero puedes cortarlos como quieras, siempre que quepan en la cuchara sopera
con los que te los comerás después) y los saltearemos en una cazuela con un par
de cucharadas de aceite de oliva virgen extra a fuego fuerte durante unos minutos.
Los sacaremos con una espumadera, y reservaremos aparte.
En la misma
grasa, pocharemos la media cebolla y el diente de ajo picados muy finitos hasta
que la cebolla se ponga transparente. En ese momento añadiremos la salsa de
tomate y la carne de ñora y dejaremos cocer un par de minutos más, tras lo cual
echaremos los trozos de sepia y remojaremos con el medio vasito de vino blanco
dejando cocer hasta que se evapore el alcohol.
Mientras se va cociendo el guiso,
pelaremos las patatas y las cascaremos (o sea, cortaremos los trozos de patata con
un cuchillo, en trozos irregulares, rompiendo al final de manera que haga “crack”)
dejando en un bol con agua fresca y limpia.
Escurrimos
las patatas, las salamos y las introducimos en el guiso, subiendo el fuego, removiendo
durante un par de minutos, y cubriendo a continuación con el agua en el que
habíamos dejado las patatas. Dejaremos cocer a fuego medio durante unos 20 a 25
minutos, dependiendo de la calidad de la patata.
Antes de
servir, espolvorearemos con el perejil picadito.
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