Los Domingos son días propicios para cocinar con calma, sin prisas, deteniéndose en los detalles; son días para usar el horno (que sirve para algo más que guardar las sartenes) y para picotear algo con una caña en la mano mientras se nos acaba de asar la pìeza elegida.
Y hoy es Domingo, la pieza elegida es un costillar de cerdo; en vez de caña, he disfrutado de una copa de un Priorato estupendo y lo he acompañado de unos boquerones. Para cambiar un poco, he decidido usar Salsa de soja para untar la pieza, con lo que consigo que el costillar tome un color precioso y un sabor espectacular.
Vamos allá.
INGREDIENTES:
- Un costillar de cerdo de 1 Kg. aprox. cortado en cuatro trozos
- 150 cl. de salsa de soja
- pimienta negra recién molida
- 1 diente de ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Para acompañar: una lechuga, una cebolleta, aceite, vinagre y sal.
ELABORACION
Para empezar, calentaremos el horno a 200 º.
Prepararemos el costillar, practicando unos cortes en la zona de carne, entre los huesos de las costillas, sin llegar al final. Pelaremos un diente de ajo y con él untaremos los costillares y a continuación los espolvorearemos con pimienta negra recién molida.
En un bol mezclaremos la salsa de soja, un par de cucharadas de aceite de oliva y medio vasito de agua y untaremos con la mezcla los costillares de cerdo por todos sus lados, especialmente en los cortes realizados reservando la marinada sobrante.
Observar que no le pondremos sal a la carne, ya que la salsa de soja que utilizaremos nos da el toque salado necesario.
En una bandeja apta para el horno, colocaremos los costillares, primero por el lado más feo y los introduciremos en el horno durante unos 25 minutos. Pasado ese tiempo, le daremos la vuelta a las piezas de carne y volveremos a untar con la mezcla que teníamos reservada e introduciremos los costillares de nuevo en el horno durante otros15/20 minutos, dependiendo del grosor de las pieza.
Para servir resulta perfecto acompañarlo de una buena ensalada de lechuga y cebolleta aliñada con aceite, vinagre y sal.
La salsa de soja que hemos empleado en esta receta ha proporcionado a estas estupendas piezas de carne un color dorado oscuro precioso y un sabor magnífico. Animaos a hacerla, es una receta que nunca falla, fácil y barata.
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